Pediatría e infantil

Pediatría e infantil

Osteopatía pediátrica

La forma de nacer puede influir en el desarrollo psicomotor de nuestros bebés. El estrés de un parto complicado y sus dificultades pueden desencadenar tensiones craneosacras que se manifiestan con los siguientes desequilibrios: deformaciones craneales como resultado de fórceps, presiones mantenidas (plagiocefalia), estado de agitación continuo, tortícolis congénitas, lesiones articulares derivadas del expulsivo…

La inmadurez del sistema visceral puede dar lugar al cólico del lactante, reflujo gastroesofágicos, gases… Es importante el detectar lo antes posible problemas posturales en el crecimiento para evitar futuras patologías.

En Arcu realizaremos una exhaustiva revisión postural y craneosacra y trataremos todas estas alteraciones y desequilibrios.

Osteopatía infantil

El correcto desarrollo del niño, desde que nace hasta pasada la pubertad, es fundamental, ya que es una etapa muy importante, en la que se establecen las bases motoras, cognitivas, emocionales…

El niño se encuentra en una etapa de continuo cambio, su cuerpo tiene que ir adaptándose a los diferentes cambios físicos que va experimentando. Este crecimiento y desarrollo puede verse alterado por:

  • Alteraciones posturales debidas a: pierna corta, pies planos, escoliosis, problemas de mala oclusión, problemas visuales…. 
  • Lesiones traumatológicas: golpes, esguinces, caídas importantes que alteren el esquema corporal, fracturas… 
  • Alteraciones digestivas: estreñimiento, gases sonoros o malolientes, dolor, hinchazón abdominal… 
  • Reflejos primitivos: Desde que nacemos es necesaria la integración de los llamados reflejos primitivos (reflejo de Moro, de succión, reflejo asimétrico cervical…..) para que el bebé pueda alcanzar todos los patrones de movimientos correctos: volteo, reptación, sedestación, gateo, marcha…

Partos complicados, caídas, posicionamientos del bebé en el útero, son algunas de las causas que provocan la ausencia o persistencia de algunos de estos reflejos, que afectarán a la evolución motora, provocando problemas o alteraciones que se manifiestan en la etapa infantil: acortamientos musculares, marcha en puntillas, equilibrio deficitario, falta de energía, problemas de escritura, lectura, habla, autoestima…

Desde Arcu, a través de la osteopatía pediátrica e infantil, ayudamos a detectar y corregir estos problemas intentando poner solución en la mayor brevedad posible, para normalizar el desarrollo motor del niño.